miércoles, 11 de marzo de 2009

Sangre, sudor y lágrimas

En las últimas semanas he dedicado parte de mi tiempo libre a escribir argumentos para una productora de televisión. Se que los chances de tener éxito con este tipo de aventuras laborales es cercano a cero, pero no hay peor diligencia que la que no se hace.


Como no tengo la menor idea sobre como escribir ficción y menos aún, ficción para televisión, he recurrido a las páginas de internet para aprender el oficio. Los anglosajones tienen la virtud de pensar que todo puede aprenderse y eso se refleja en sus manuales. Hay manuales para escribir "damn good mystery novels" o "chic lit" (que supongo debe ser novelitas para señoritas); kits para pulir diálogos o armar el plot y software para facilitar la escritura de guiones. De todo. En la mente gringa, basta voluntad, paciencia y trabajo para dominar el oficio.


En la mente colombiana, el oficio de escribir no puede dominarse porque no es un oficio, es un ARTE. El arte esta lejos de poder aprenderse, es un don divino, una sensibilidad especial que se transmite en un gen o en el mejor de los casos, una habilidad que se descubre después de sufrir montones. Por esa razón, es difícil conseguir en Colombia manuales para aprender a escribir y en las facultades de literatura evitan la enseñanza práctica. Prefieren transmitir información al estilo de "Literatura rural latinoamericana en el Siglo XIX" o "Changó el gran putas: mito, lenguaje y transgresión"


Hasta el mas cretino sabe que el talento innato sirve, pero también, que la practica importa y mucho. En Colombia eso se olvida rápido y el cuento de la sensibilidad artística termina sirviendo para ocultar la falta de trabajo e impedir la crítica. A los artistas no se les puede molestar, burlarse o corregirlos, se delican. No ve que son artistas.

*El argumento, a pesar de los manuales y los wiki how, me quedó bien regular.

14 comentarios:

JuanDavidVelez dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
JuanDavidVelez dijo...

Esta muy bacana y muy interesante la entrada.

Pero esta entrada si esta pues muy emo, quejandose del pais y sus facultades y sus librerias, que es que aca no valoran el trabajo duro como en la usa, que por alla si valoran el sudor de la frente, no como aca que el talento es rey.

No creo que aca en Colombia sea dificil conseguir esos manuales. Tampoco le creo que en las facultades de literatura eviten la enseñanza practica.

¿que putas es el talento?. Voy a buscar en wikiwhat.

Apelaez dijo...

Ole si, no queria sonar emo. Al contrario, creo que cualquiera puede ponerse en la tarea de aprender el oficio a punta de practicar y con la ayudita de uno que otro manual. Tambien es cierto que aca se pueden conseguir manuales (mucho menos que en USA, pero asi es con todo, no?) y probablemente existan universidades con enfasis práctico, la que yo conocí, pocón, un par de talleres y ya, el grueso era del otro estilo.

JuanDavidVelez dijo...

Acerca del talento, el trabajo y las facultades: Mi compañero mas teso del colegio hizo una especializacion en mercadeo, yo le pregunte "oi, ¿ahi les enseñan a interpretar los datos del mercado?", el hombre me dijo "hermano, interpretar los datos fue una cosa que nos enseñaron en el colegio, parece que vos no aprendiste".

Una vez en un examen un man muy teso utilizo un teorema "raro" de geometria (para mi, exceptuando el teorema de pitagoras, todos los teoremas son raros). La profesora tambien era como yo, porque le dijo que no se podia usar ese teorema sin demostrarlo, resulta que con ese teorema el examen salia muy facil, solamente que el unico que lo vio fue el, la profesora no le valio el punto, el man no podia creer, le dijo "¿entonces si uso el teorema de pitagoras lo tengo que demostrar?", la profesora, como todas las profesoras del mundo no cambio de opinion. (el man se llama Carlos Zafrane, el apellido sonaba asi yo no se como se escribe, la materia era resistencia de materiales, no me acuerdo como se llamaba la profesora).

El talento es una cosa muy injusta, cuando mi idea revolucionaria llegue al poder lo voy a abolir.

JuanDavidVelez dijo...

Hey apelaez, por el bien de la television espero que en tus argumentos a la protagonista se la coman muy seguido, aunque tambien se deben comer a la antagonista, una television democratica.

Espero que los dialogos de las pichadas sean muy verosimiles.

Anónimo dijo...

Pretender que el talento se enseña es creer que cualquiera que empiece a jugar fútbol o golf desde los cinco años llegará a ser como Maradona o Tiger Woods. Pretender que, como ya se ha leído mucho, o se ha visto mucha televisión, ya se sabe cómo es el oficio de escritor o guionista, es pensar que un fanático de la música puede escribir una ópera de inmediato porque ha oído La Boheme todos los días. Me imagino que los manuales y los talleres sirven, más que todo, para poner el talento en práctica, y, como si se tratara de un músculo, ejercitarlo para que no se diluya en la modorra. Sirven, en últimas, para entender que la inspiración y las musas son un cuento chimbo; lo que realmente vale es la transpiración. A algunos les serán útiles; otros quizá puedan prescindir de ellos porque ya tienen la disciplina adquirida (y les importa un rábano compartir sus ideas en público).

Lo que sí es cierto es que ya bien jodido es enfrentarse a la hoja en blanco como para que, además, se crea que lo que se va a hacer tendrá un éxito "cercano a cero". Casi nunca saldrá algo que tenga valor en las primeras semanas o meses, pero con oficio, sudor, humildad y una buena idea detrás quizá se logre un producto que incremente un poco esas posibilidades de "éxito". Por supuesto, está bueno aplicar eso que Hemingway denominaba como "detector de mierda" (sin un mínimo de rigor termina uno escribiendo como Ángela Becerra).

Como usted bien lo dijo, la práctica importa, y mucho.

jcm

Johan Bush Walls dijo...

Sabe, maestro, siempre he pensado que hay dos tipos de personas, las que tienen talento y las que trabajan duro.

Las segundas son las que tienen, la mayoría de las veces, más posibilidades de éxito, porque saben que lo que van a hacer les va a costar trabajo, y lo practican con disciplina, hasta que llegan a dominarlo, claro que la mayoría de las veces les falta la chispa que tiene el talentoso.

El que tiene talento usualmente es haragán, sin disciplina y, lo que es peor, no se da cuenta que lo tiene.

Creo, también, que es posible aprender cualquier cosa, es más, para las series de TV hay recetas que garantizan el éxito, eso quizá haga más sencillo el trabajo, porque no hay que tratar de reinventar el agua azucarada.

Salú pue.

Lanark dijo...

Me pregunto quién es el que pretende que "el talento se enseña". Yo volví a leer la entrada y constaté que no es Apeláez, ni ninguno de los comentaristas. Quién sabe de dónde salió eso.

Es muy bueno, en efecto, que haya gente con talento, y que esos no se enfrenten con demasiadas dificultades para ejercerlo. Sin embargo, esa especie de culto al talento que es la manera como entienden alguns personas ignorantes la apreciación del arte, es muy dañina. La gente con talento ha dejado un legado tremendo, igual que la gente sin talento. Y, de hecho, como menciona Johan Bush Walls, el culto al talento también hace daño a los talentosos porque los vuelve perezosos y posiblemente hasta mediocres.

Realmente con unas reglas básicas se puede escribir de manera competente con algo de práctica, y haber escrito no-ficción también cuenta como práctica. Escribir bien nos cuesta a algunos más trabajo del que estamos dispuestos a invertir, pero a otros les sale más fácil sin necesidad de ser ningunos genios. Yo creo que eso del talento no consiste en que o se es un supergenio o se está negado; tiene que haber algo en medio.

Realmente me parece que en un medio tan lamentable como la televisión colombiana, que la gente al menos se preocupe por hacer honestamente su trabajo bien, en vez de lagartear y sabotear a otros, sería ya un avance. Y si se preocuparan por aprenderlo en vez de entregarse a la histeria de repetirse "yo tengo talento" a lo Jorge Duque Linares, sería maravilloso.

Diego Fonseca dijo...

Me has hecho acorsar de "La corchea y el orticón: interacción y propuesta" --y de un millón de txt de universidad en Argentina.
Suscribo tu criterio.

Apelaez dijo...

Siempre bienvenido don diego, saludos por allá en mayami

Anónimo dijo...

Pelaez: Cómo que no tiene ni idea de escribir ficción. Todo es ficción. Los blogs y los periódicos. Los noticieros y las telenovelas. Ya tiene entonces las dos cosas que cree necesitar: práctica y talento. Espero que en su caso sean suficientes. Yo, sin blog y dudando cada vez más de mi talento pero con algunas palancas, no lo he conseguido. Lo que falta en Colombia, creo que en USA también, son ventanas abiertas para lanzar esos argumentos "anónimos" con la intención de que algún Midas del entretenimiento los lea y los apoye.

Apelaez dijo...

Anonimo, cuente más bien como ha sido su experiencia con esas vainas.

Anónimo dijo...

Fascinantes y liberadoras, es mejor sudar y llorar por eso que por un proveedor de volantes incumplido, pero desechadas y rechazadas. A decir verdad, no han sido mis únicos textos condenados al destierro: alguna vez me pidieron una columna para un prestigioso periódico nacional y fui víctima del silencio administrativo negativo. Por lo menos, uno de mis guiones fue calificado de chévere pero muy loco. Y hasta ahí. Para que no se delique usted (todos los que escriben son enfermos terminales) y siga en el intento, mis guiones reprobados eran más de corto que de tv, aunque tenían una declarada vocación de serie televisiva.

La técnica más aceptada (cada vez entiendo mejor mi fracaso) es sencilla: diálogos contextualizados que dilatan y reiteran. Personajes arquetípicos y espacios que generen identidad. Pero todo eso es secundario. Lo importante, como dijo por ahí en un taller de guión el escritor de Cien años de soledad, es contar una historia. Yo, como buena mula, sigo tratando de contar historias y de encontrar una audiencia para las ya escritas.

Le recomiendo también leer guiones, en lugar de manuales. En internet se consiguen: pone moviescripts en yahoo y los algoritmos hacen el trabajo por usted.

Juansemo dijo...

Muy buen blog, hasta ahora lo conozco y lo voy a empezar a seguir. Y si... recuerdo esos días de "escritura audiovisual" en la Universidad: el 5 estaba garantizado si se escribía un cuento rosa con Daniela Franco incluída. (Efectivamente ese profesor escribía capítulos de Fathers and Sons...)

Saludos