viernes, 14 de marzo de 2008

Los Santos

La familia Santos no sólo ha sido dueña del periódico con mayor circulación en la historia del país, de un canal de televisión y de varias empresas relacionadas con los medios de comunicación. También ha tenido a sus miembros en los más altos cargos públicos: Presidente, Vicepresidente, Ministro. Un clásico ejemplo de colusión entre política y prensa.

Enrique, uno de los vástagos rebeldes, nos cuenta que siempre ha estado en desacuerdo con los miembros de su familia involucrados en política. En varias entrevistas ha puesto de presente la prohibición de la puerta rotativa entre el poder y el periódico. Porque oígase bien, El Tiempo es un medio objetivo, puro y transparente.

Esa historia -y esa crítica- la hemos oído hasta la náusea. No hay lector de El Tiempo que no la repita en algún almuerzo familiar o en una clase universitaria. A todos nos parece que la familia Santos podría facilmente ser la fuente para un nuevo "El Padrino" y que su excesivo poder político-mediatico no es una buena noticia para la democracia colombiana.

En esas discusiones de cafetín nos imaginamos a "la familia" intrigando y planeando complots en una sala enchapada en caoba. -Señor periodista, esa noticia no sale y punto. No, no, no, me importa un comino que sea de interés general. Nos imaginamos a "la familia" con una agenda oculta y todopoderosa. Pero a "la familia" no le interesa modelar el país, le interesa ganar plata, mucha plata.

La estrategia de "la familia" va encaminada a maximizar sus utilidades. Para eso necesita llegar al público más amplio posible y eso sólo se logra bajo tres condiciones: reducir costos, aparentar objetividad y desechar cualquier sesgo partidista.

Las investigaciones profundas y complejas sobre aspectos de la realidad nacional son caras. Se necesitan periodistas bien formados y bien pagados, asesores con conocimientos específicos, recursos y tiempo para adelantar la investigación. En cambio, la opinión o las notas superficiales son un insumo relativamente barato. La opinión debe estar balanceada para que le guste al espectro más amplio posible: va Poncho, Hommes y Collazos. La escala reduce los costos y la tolerancia con un gobierno popular garantiza lectores, eso si, siempre y cuando se mantenga la pantalla objetiva y se le permita a las voces disidentes expresar sus opiniones.

La familia Santos ha dejado el manejo de sus asuntos al más frío cálculo financiero, cada movida tiene una explicación más económica que política. La mayoría de sus decisiones editoriales son una respuesta a esa manera tan milimétrica con la que han manejado el feudo. Los complots cinematográficos en las salas de caoba probablemente existan únicamente en nuestra mente, la realidad puede ser bastante más aburrida .

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Una vez me llevaron en un recorrido a las instalaciones de El Tiempo y me desmallé en medio de las rotativas. En ese edificio huele a azufre.

Third Party Links dijo...

lo mejor para enterarse de como va el pais de verdad es acudir a cnn, AMERICA ECONOMÍA, BLOOMBERG O REUTERS....EL TIEMPO, SEMANA, DINERO, EL ESPECTADOR Y LOS DEMAS DIARIOS DE PROVINCIA están amañados

Anónimo dijo...

Ya lo dijo Antonio Caballero: mientras que The Guardian se lee en cuatro horas, El Tiempo se lee en cuatro minutos. La información cultural da risa, el resto del mundo no existe y el periodismo profundo y de análisis brilla por su ausencia. Es un producto muy mediocre, que no resiste ninguna comparación con ningún diario de importancia a nivel latinoaméricano, y en el que da la impresión que los espacios libres de la publicidad y clasificados son rellenados con noticias. Eso sí, aún conserva los dos atributos que le interesan a la familia Santos: es un negocio rentable y preserva su influencia intacta.

La excusa de El Tiempo, que he oído muchas veces, es que sus lectores no tendrían tiempo de leer un contenido más extenso y profundo. Patrañas: es que el periodismo de calidad vale plata. No es que se vayan a quebrar por ofrecer un diario de mayor envergadura, pero es que cada pesito ahorrado a costa de la calidad cuenta.

Los pueblos no sólo tienen los políticos que se merecen; también tienen los medios que se merecen. Tenemos los políticos y los medios que nos merecemos: ambos provienen de la familia Santos. JCM

Carlos Méndez dijo...

No se cual es la relevancia de esta nota, si ya los Santos no tienen la mayoría de acciones en El Tiempo, sino el grupo Planeta.

Ya los Santos perdieron su poder. Es solo cuestión de meses o un par de años, y Planeta tendrá todo el control.

juglar del zipa dijo...

he estado en el tiempo cuatro veces. la primera vez fui hace once años y era un adolescente optimista que pensaba en una carrera como periodista (ese niño volvió más tarde). el recorrido comenzó en la sección de mercadeo y el señor encargado de la visita nos decía, con tono entre orgulloso y escéptico o displicente, no sé bien, que mercadeo era el departamento más grande del periódico y que aquí era donde finalmente se decidía si se publicaba algo o no, en términos de espacio.

a cualquier persona más o menos relacionada con el diseño editorial (o que conozca otros periódicos "de referencia") le queda fácil ver que el manejo del espacio en el tiempo (jo jo) es cosa grave, que van trepando avisitos de coconito cada vez más arriba y al final no aparece nada.

claro que por la plata se puede hacer mucho. claro que sí. los mismos periódicos de referencia también son empresas y sus dueños quieren plata. pero se tratan con más respetico, aun sin contar con competencia.

en fin, volveríamos a lo de siempre.

juglar del zipa dijo...

por otra parte, si el proyecto es tener plata no está mal transformar la realidad, la opinión de la gente y la forma como la reconocen. así que no es solo hacer plata, el proyecto económico está apalancado al proyecto político y eso lo deciden en reuniones della famiglia.

creo que samper alguna vez lo puso en esos términos.

Felipe dijo...

Con la familia Santos va a pasar lo que termina pasando con casi todas las grandes familias con mucha plata. Desde la tercera generación deja de haber herederos muy bien preparados para hacerse cargo de las cosas. Por ahí hay una teoría que habla de cómo la tercera generación tiende a mamarse toda la fortuna que creó el abuelo. Claro, seguirán siendo riquísimos comparado con el resto de colombianos. Pero la próxima generación, los que hoy soy jóvenes, no va a tener el mismo poder...

Lanark dijo...

Muy buen post. Me parece que hace falta que los opinadores de la política, sea en la blogosfera o en algún medio mas importante, deberíamos usar más a menudo el principio de la navaja de Occam: ante dos explicaciones igualmente satisfactorias, quedarnos con la más simple. Eso nos curaría de tanta conspiranoia y nos haría más racionales, me parece.

Creo que a pesar de que el accionista mayoritario sea PLANETA, esta manada de mamíferos (los Santos) todavía tiene muchísima injerencia en su periódico. Pero el principal argumento del post, que según entendí es que realmente no hay necesidad de acudir a las teorías de la conspiración para explicar la reducción de un periódico serio a un pasquín lamentable, sino a la simple codicia de los dueños.

Es cierto lo que dice el Juglar de que el Guardian, el Independent, y otro montón de periódicos que sí son buenos son también de empresas interesadas en ganar tanta plata como puedan. Lo que hace una diferencia, es cómo defina cada cual su utilidad, qué entienda por ganancia.

La casa editorial El Tiempo, cuando era independiente, y el grupo PLANETA, que la adquirió después, parecen ser exponentes de un comportamiento que yo he llamado plaga de langostas y del que he hablado respecto a otras cosas. Se trata de buscar obtener ganancias deteriorando los recursos disponibles, algo así como matar la gallina de los huevos de oro. Una actividad económica que agota recursos aquí, se mueve a otro lado, los agota allá, y así, hasta que ya no hay para dónde seguir, y colapsa. Como una plaga de langostas.

De modo que todo comienza con un periódico más o menos bueno, que no sólo se ha ganado su preponderancia a punta de política sino también con calidad, y ha jugado un papel importante con el desarrollo cultural del país. Explotan ese capital, pero no sólo no invierten en conservarlo, sino que no dudan en hacer cosas que lo agoten cuando pueden obtener unos centavos con eso.

Apelaez dijo...

De acuerdo con todos, en especial con Lanark. Ese es el punto, y buena la metafora de las langostas.

Es verdad que el Tiempo se lee en menos de cuatro minutos, incluso el del domingo, lo acabo leer en tres minutos flat.

Y bueno los de planeta ahora son los dueños y supongo que seguirán en la misma linea en la que venia la familia, tambien, claro, aprovecharan sus contactos en la alta política, y a lo mejor no hacen un copy paste de sus mejores articulos en la madre patria. Al menos si lo hubieran comprado los de El Pais tendriamos un mejor contenido. Pero bueno. Ni modo. Gracias interné por dejarnos acceder a otros periodicos menos chimbos.

Anónimo dijo...

la prensa y revistas "serias" que circulan en CULOMBIA son un reflejo de la IDIOSINCRASIA del pais...repleto de zambos e iguazos mal educados y semianalfabetas a los cuales es dificil instruirlos en algo productivo y legítimo....si el publico pide AMARILLISMO Y PUBLICIDAD demosle lo que le agrade y lo EMBRUTECE

patton dijo...

De acuerdo especialmente con lo de la chambonada y falta de calidad. de Un Tiempo (jojo) para acá estoy recopilando "perlas".

Ai.Bi. Colombia dijo...

estoy de acuerdo, el periódico no tiene mucho contenido y el suplemento del domingo con un súper diseño y demás, es puro bluff. Supuestamente estaban imitando a la revista del domingo de El Pais de ESpaña!!!
te amo Ale