sábado, 1 de diciembre de 2007

Transportadores y política

Siempre que hay elecciones municipales en las grandes ciudades de Colombia, y en especial en Bogotá, se habla del poder y la influencia de los transportadores, pero ¿Por qué estos personajes juegan un papel tan importante en el proceso político?

Para empezar, el esquema del negocio esta basado en una figura que se parece más a una estructura feudal que a una organización comercial. Las empresas transportadoras tienen serie de permisos otorgados por las alcaldías para operar rutas. Dichos permisos han sido generalmente otorgados por las administraciones pasadas con base en criterios políticos o bajo arreglos poco transparentes con los burócratas locales.

Una vez se han conseguido estos permisos, las empresas "venden el cupo" a las personas interesadas en operar en las rutas de la organización. El negocio es simple, el que compra el cupo -el "siervo"- debe pagar un derecho de entrada (cupo) que asciende a varios millones, poner el vehículo a operar y pagar mensualmente por el "rodamiento". Los riesgos del negocio están todos en cabeza del "siervo". Si el bus se estrella o tiene una falla mecánica es problema del "siervo"; los gastos de mantenimiento, gasolina y limpieza también van por cuenta del personaje.

La única función operativa de la empresa -Señor feudal- , consiste en recaudar mensualmente los rodamientos y los cupos de los nuevos siervos. Al señor feudal no le importa cuanto recaude su siervo o si tiene el vehículo dañado, sucio o engallado como un árbol de navidad, sólo esta interesado en que pague completo, y a tiempo, la suma fijada.

Pero aun cuando el señor feudal tiene pocas obligaciones administrativas, tiene un pequeño problema: los permisos otorgados por la Alcaldía no generan derechos adquiridos ni tienen una duración establecida, de hecho, pueden ser revocados en cualquier momento y sin requerir su consentimiento. Esto implica que los transportadores tendrán como prioridad evitar a toda costa que la administración le remueva sus permisos.

En consecuencia, el transportador destina sus recursos a cultivar una fuerza política suficientemente fuerte para mantener sus permisos, o a sobornar funcionarios para mantener o adquirir nuevos permisos. El esquema feudal genera unos incentivos perversos que necesariamente desembocan en corrupción y politiquería, sin hablar de ineficiencias y pésimo servicio.

8 comentarios:

Maldoror dijo...

No me parece que se pueda equiparar con feudalismo lo que pasa con las emopresas transportadoras. De hecho, es puro capitalismo adaptado a la criolla: un sistema inumano de patronaje, donde los dueños de las empresas por un lado sobornan a los oficiales del estado para obtener las rutas y el negocio, y por otro lado un sistema de explotación inhumano y alienante donde los choferes trabajan en jornadas extenuantes por un salario que esta determinado por cuantos pasajeros recojan. Quizas el sistema de jerarquias parezca feudal, pero es en el fondo el sistema jerarquico ideal del capitalismo: el conductor completamente subyugado a la voluntad del patrón, en una relación meramente ecónomica

Apelaez dijo...

Yo creo que el esquema del transporte publico colectivo en colombia tiene casi todas las fallas de mercado existentes (buqueda de rentas, tragedia de los comunes, etc)y podría resolverse con una regulación mas capitalista y menos rentista (o feudal).

Ideas: que los permisos de operación se otorguen por licitación (el que ofrezca mas se lleva la ruta) y tengan un termino definido. Así se le garantiza a la empresa su "propiedad" y se elimina la incertidumbre y la intervención abusiva del estado. Se puede establecer que los vehiculos sean propiedad de la empresa con lo cual se impide el traslado abusivo de los riesgos a una parte debil y se garantiza que los choferes tengan un contrato de trabajo normal.

No creo que baste con rasgarse las vestiduras por el capitalismo alientante y esas cosas, lo que toca es ponerse a pensar cosas que resuelvan practicamente la solución y no quimeras quijotescas como le gusta a los agitadores de la izquierda pendeja.

Maldoror dijo...

Apelaez:

No se trata de "rasgarse las vestiduras" sino de que descripción es mejor para entender lo que pasa con el sistema de transporte urbano en Bogotá (es como si -salvando las diferencias históricas- viniera algun caballero feudal y le dijera "deje de rasgarse las vesitudras con sus arengas anti feudales, lo que hay que ver es como solucionamos el problema..."). No veo porque el actual modelo no es capitalista (incluido la posibilidad de una competencia feroz por los usuarios).


Mi idea para solucionarlo sería expropiar las empresas de sus actuales dueños (quienes no pueden ser considerados sus legitimos dueños, en tanto han obtenido las ganancias que tienen a través de sobornos y de la corrupción y la compra de oficiales del estado), entregarselas a los choferes y crear una sola empresa bajo control estatal para que fije rutas establecidas , con paraderos y donde los choferes no se les pague por pasajero recojido.

Apelaez dijo...

¿Y que hace con los propietarios de los buses; que ni son choferes, ni hacen parte de la empresa? También les expropia los buses? Y por qué, si ellos los compraron legalmente?

P.D. Según su definición, incluso el feudalismo seria capitalismo, y hasta el socialismo real caería en dicha definición, pero bueno.

Maldoror dijo...

Apelaez:

¿En que forma de feudalismo los siervos reciben trabajo asalariado y son libres de cambiarse de trabajo? ¿En que forma de feudalismo el señor feudal opera bajo los principios de maximización de sus beneficios?

Apelaez dijo...

Muchos de los transportadores no son asalariados, se quedan con el excedente despues de pagar el rodamiento (igual que los siervos). Las empresas de transporte no operan bajo la maximización de los beneficios en el sentido capitalista, de hecho no se si nota que la mayor parte de los buses van vacios (lo que les importa es cobrar el rodamiento y aumentar los permisos para servir rutas, muy similar a los señores feudales)

Maldoror dijo...

Apelaez:

Los choferes no tienen un salario fijo, es cierto. Pero lo fundamental es que venden su fuerza de trabajo (elsiervo no tiene esa chance). Es más, los choferes tienen la posibilidad de un asenso (de pasar a ser dueños de un bus a pasar conformar su propia empresa), cosa que jamas ocurriría en un sistema feudal.

En cuanto a lo de la maximización de beneficio, como me lo hizo notar un estudiante de economía que tenía un blog ya desaparecido, los transportadores se dan ese lujo porque el pasaje esta subsidiado y no hay ninguna politica regulatoria de asignación de rutas y de buses (y la que hay no se cumple igual). Pero la empresa transportadora es un negocio, solo que funciona con ventajas comparativas que otros no tienen, dado el sistema de corrupción y prebendas que recibe de oficiales del estado.

Apelaez dijo...

El pasaje de bus no esta subsidiado en Colombia (aunque el TM esta funcionando por estos dias con subsidio de un fondo mientras ajustan la tarifa). De hecho los transportadores odian a la Universidad de los Andes porque fue la que diseño la metodología para calcular el valor del pasaje.

Sobre que no hay politica regulatoria, si la hay, de hecho el mayor patrimonio de una empresa de transporte son las rutas asignadas y la capacidad transportadora que le fija la administración.

También esta el transporte pirata, que es otra cosa y en el que tambien estan involucradas muchas empresas legales. Pero ese es otro cuento.